«Mis vecinos» Un «voyeur» en épocas de selfies Julio 2016
Por Viviana Cavalié
El fotógrafo porteño exhibe “Mis Vecinos 2015-2016” en la fotogalería “Horacio Echaniz”del Centro Municipal de Cultura. Una serie de imágenes que se entromete, no sólo en la vida de los fotografiados, sino también en la del observador que pasa a ser cómplice de la trama que observa.
Natan llegó este viernes a Santa Rosa -convocado por la fotógrafa francesa Marie Oudot- para brindar la charla “Un voyeur en época de selfies” en el Colegio Médico de Santa Rosa, y estuvo de visita por su muestra dialogando con un grupo de espectadores interesados en la obra.
¡Cómo los extrañaba! fue lo primero que dijo el fotógrafo al reecontrarse con sus vecinos en la fotogalería del Centro Municipal de Cultura. Y claro, porque Natan creó un vínculo intenso con este grupo humano captado por su lente en la cotidianidad de sus vidas.
Aprovechamos este encuentro para charlar con el artista y adentrarnos en algunos aspectos de esta muestra y de su visión de la fotografía.
¿Cómo desarrollaste esta serie, desde la idea a la práctica?
Yo los venía viendo a ellos desde la ventana donde trabajaba. Hace un año y medio me separo, entonces comienzo también a vivir en mi lugar de trabajo, por lo tanto los empiezo a ver más seguido. Yo trabajo a través de como me voy sintiendo, y hasta vi la necesidad de tomarlos como familia -por decirlo de algún modo-. Entonces yo me levantaba, y estos vecinos eran mi contacto diario del día a día, como parte de mi familia. Así es que los empiezo a incorporar a mi obra. Y surge ésto. Yo soy voyeur por naturaleza, me encanta espiar. Ellos están ahí expuestos, y yo los espío.
Todo ésto transcurre en un barrio céntrico de Buenos Aires, donde no es habitual ver este tipo de cosas. Es una casa tomada, en la que le alquilan a ellos esta parte de arriba. Nos separan uno 20 metros. Yo tengo una ventanita, una rendija muy chiquitita y me cuido para que no me vean. Soy un espía.
¿Siempre hay un eje temático en tus proyectos?
Si. Siempre tengo temas. Uno si no se ordena y no ejecuta a través de lo que va sintiendo en el momento, hace fotos sueltas que no sirven para nada. Más ahora, que hay tanta foto dando vuelta. Yo creo en la edición, en el orden y en los temas cerrados. Según lo que voy viviendo en mi vida voy haciendo un tema.
La gente ¿está muy presente en tu obra?
No, muy poco. En este trabajo hay gente, pero de hecho no me gusta la gente, soy bastante ermitaño. Acá los espío y estoy solo.
¿Una buena fotografía se busca o se encuentra?
Primero hay que encontrar dentro de uno qué tiene para decir, para contar, es como un escritor que primero tiene una idea en la cabeza. Una vez que esa idea está clara, el resto se te presenta, porque ya el radar empieza a buscar y ahí está la foto. Pero hay que partir de un concepto, de una idea, para que puedas enfocar. Si no hay idea, sirve todo, y ahí es donde nos confundimos.